Si quieres lucir una piel radiante en tu rostro, deberás instalar ciertos hábitos en tu día a día con los que vas a conseguir resultados increíbles. Lo primero que queremos decirte es que cuidar la piel del rostro y del cuerpo debería ser algo instaurado en la educación de todos nosotros, no sólo cuando empiezan a aparecer los primeros signos de envejecimiento, son desde que somos pequeños. Tu piel debería ser siempre una prioridad y cuidarla es imprescindible para verte y sentirte bien.
Limpiar la piel de nuestro rostro, hacer ejercicios para tonificar la musculatura de la cara, aplicar aceites nutritivos, cremas hidratantes, exfoliarla o aplicar protección solar, es algo que ya deberíamos hacer en nuestra rutina facial diaria, para dar a nuestro rostro toda la protección, hidratación y tratamiento que necesita. Esperar a que la piel presente arrugas, bolsas, ojeras, manchas, irritaciones o que se vea claramente reseca y deshidratada, quiere decir que llegamos un poco tarde, pero aún estamos a tiempo de actuar. Esto no quiere decir que ya no puedas solucionar el problema, pero ten en cuenta que va a costar un poco más y que deberás revertir ese daño, apostando por una rutina facial que pueda cuidar de tu piel de una forma efectiva.
Limpiar e hidratar tu piel
Es mucho más importante limpiar e hidratar la piel que maquillarla, pero invertimos mucho más tiempo en lo segundo. Nos gusta vernos bien y aplicamos productos para mejorar nuestra apariencia y dotarla de un aspecto más joven y saludable. Si quieres conseguir que tu rostro se vea saludable, es recomendable seguir unas prácticas diarias de higiene e hidratación, para conseguir que realmente se vea saludable, sin necesidad de maquillarte si no quieres.
Rutina de cuidado de día y de noche
Se acabó eso de cuidarnos solo de vez en cuando o cuando nos acordamos. Cuidar la piel de nuestro rostro y de nuestro cuerpo es una auténtica prioridad y, para ello, es imprescindible tener una rutina facial de mañana y una rutina facial de noche. Escoge momentos del día que tengas, al menos 15 minutos, para realizar este autocuidado de forma calmada y dedicando el tiempo que tu piel necesita.
Limpiadores suaves y respetuosos para tu tipo de piel, aceites hidratantes, tónicos equilibrantes, serums, exfoliantes, crema hidratante, contorno para ojos y labios, protector solar… Es importante elegir bien el producto y también no colapsarse comprando una cantidad exagerada de cosméticos, ya que tu rutina debe convertirse en un proceso funcional y práctico para tu día a día. Solo así, conseguirás que el cuidado facial sea constante y que disfrutes haciéndolo diariamente.
Durante el día necesitarás productos con texturas más ligeras y deberás acabar tu rutina con un protector solar, para protegerte de la irradiación solar. Para la noche, en cambio, deberás elegir productos más nutritivos y densos, para ayudar a la piel de tu rostro a hacer ese reset que necesita, para eliminar todas las toxinas del día.
Aprende sobre cuidado facial e invierte en productos de gran calidad
Además de implantar tus rutinas de día y de noche, tienes que conocer algo que también podrás integrar en ellas y es la dedicación para aplicar cada producto de la forma más efectiva; A toquecitos, con auto masajes, con movimientos circulares… Todo ello, hará que actúen de forma más efectiva y que penetren mejor en nuestra piel y hasta tengan un efecto drenante. Cuidar la piel a diario será un auténtico placer, si empleas los conocimientos, técnicas, productos y herramientas más adecuadas.
Bebe más agua
De nada sirve utilizar cosméticos de máxima calidad, si tu alimentación deja mucho que desear y no te hidratas correctamente. Beber agua i líquidos durante el día, te permitirá mantenerte hidratado y, por tanto, mantener el equilibrio también en tu piel. Una dieta saludable y equilibrada, hará que luzcas una piel más radiante y más saludable. Por otro lado, la realización de ejercicio físico va a conseguir que te sientas mejor, más liberado y con menos estrés, algo que también se verá reflejado en tu cara.
Utiliza protector solar, también en invierno
Acostúmbrate a sellar tu rutina facial de día con un protector solar, ya que no sólo es importante protegernos de la radiación solar intensa durante el verano, ya que en invierno, e incluso los días nublados, el sol también puede dañar nuestra piel.
Evita malos hábitos
Si quieres cuidar tu piel de la mejor manera posible, deja los malos hábitos atrás. Es un momento ideal para dejar de fumar, dejar las bebidas azucaradas, retirar las grasas malas de tu vida, los azúcares y harinas refinadas. Es un buen momento para dedicarte a ti y al autocuidado en todos los aspectos. Contacta con un nutricionista que pueda explicarte cómo conseguir una dieta sana y equilibrada y descubre cómo puedes transformar tu vida, obteniendo el mayor bienestar, tanto físico como mental.
No es necesario que hagas todos los cambios al mismo tiempo, pero es importante que vayas integrándolos, para conseguir el máximo bienestar y confort contigo mismo, sintiendo una mayor conexión y escuchando mejor a tu cuerpo.
Ducha en lugar de baño
Aunque es relajante y de vez en cuando puede sentarte de maravilla, apuesta mejor por duchas cortas y con agua tibia, sin que llegue a ser demasiado caliente, ya que es la mejor manera de cuidar la piel de tu rostro, cuerpo y cabello.
Suavidad ante todo
Aunque no te haga daño y ya estés acostumbrados a hacerlo así, secar la piel o el pelo bruscamente cuando salimos de la ducha, puede causar daños visibles. Secar nuestra piel con suavidad es muy importante y, al hacerlo a toquecitos suaves, estamos evitando irritaciones y sequedad en la piel. Si lo hacemos friccionando o secando con brusquedad, conseguimos todo lo contrario. Mímate de una forma más amorosa y verás cómo la piel de tu rostro te lo agradecerá.
Humecta la piel
Si tienes la piel seca, es recomendable utilizar un humectante que se adapte a tu tipo de piel y si es de uso diario, puedes optar por un humectante que también tenga FPS. Es importante fijarnos en las necesidades que presenta nuestro rostro y también nuestro cuerpo en cada momento, para aportarle la hidratación que necesita.
Estrés a raya
Pocos factores externos son tan visibles en la piel de nuestro rostro como el estrés. Los nervios se notan por dentro y por fuera y dañan nuestra salud en todos los aspectos. Lo más recomendable es elegir hábitos, prácticas y rutinas que nos permitan combatir situaciones estresantes, tanto como nos sea posible.
Ejercicio físico, autocuidado, meditación, dedicar tiempo a hacer cosas que nos gustan, coleccionar momentos bonitos, hablar con gente que nos aporta positividad e ir alejando, por otro lado, todo aquello que nos resta y nos genera malestar.
Cuidar nuestro cabello y cuero cabelludo también te permitirá sentirte más a gusto contigo misma/o. En nuestra tienda online podrás encontrar todo tipo de productos para un buen cuidado capilar.
Estos son algunos de los mejores consejos que podemos darte y con los que lograrás empezar este nuevo año 2023, por la puerta grande. El cuidado facial te permitirá tener tu rostro como hacía años que no lo veías y, por otro lado, irás integrando buenas prácticas para ofrecer tu mejor versión y gestionar tu día a día de la mejor manera posible. La piel del rostro habla por sí sola y, en cuanto empieces a realizar una rutina facial diaria, verás resultados rápidamente.
¡Realizar un cuidado integral, se convertirá en tu momento favorito del día!